Lo habíamos anunciado y hoy traemos las imágenes del acto en homenaje a la última pareja homosexual ejecutada en Francia, además del vibrante discurso de Anne Hidalgo, alcaldesa socialista de París, que hemos tomado de su Facebook:

Inauguro hoy la placa que honra la memoria de la última pareja ejecutada porque era homosexual. El 4 de enero de 1750, Bruno Lenoir y Jean Diot fueron arrestados antes de ser condenados a muerte, para ser ejecutados algunos meses más tarde. Es en París dónde se efectuó esta infamia y es en París que afirmamos hoy que nunca más nuestra ciudad aceptará la menor forma de homofobia.

Es  nuestro deber acordarnos del horror con el que tuvieron que enfrentarse las parejas homosexuales durante siglos. No podemos olvidar el sufrimiento de aquellos que no habían cometido otro crimen que el de amar, ni negar las persecuciones en las que fueron el objetivo. No podemos tampoco olvidarnos de las cifras terribles que revelan que la homosexualidad está todavía considerada como un crimen o un delito en cerca de 80 Estados, y que sigue siendo castigada con la pena de muerte en 11 de ellos.

Lentamente, luchando contra los conservadurismos, revolviendo las pusilanimidades políticas, nuestro país ha conquistado auténticos progresos. Adoptó, hace un año y medio, una ley que autorizaba por fin a las parejas del mismo sexo a casarse. Fue un gran momento, en el curso del cual colectivamente honramos los bellos valores de nuestra República. Pero hoy, debemos con lucidez y determinación, trabajar por la neutralización de una homofobia que no ha desaparecido. A veces reivindicada de modo insoportable, a veces destilada de modo insidioso y solapado, permanece como un veneno destructor en el seno de nuestras sociedades y constituye una carga muy pesada para centenares de miles de parejas. Los avances legales obtenidos  a lo largo de las pasadas décadas  no deben ocultar la realidad de la vida cotidiana.

Hoy, nuestra movilización no debe pues debilitarse porque vivir su identidad serenamente es un derecho inalienable. Porque la igualdad entre todos los ciudadanos debe permanecer como una prioridad absoluta, haremos todo lo posible  para que el recrudecimiento de las intenciones y las violencias homofobas, al cual asistimos regularmente, sea frenado. A las persecuciones del pasado, queremos oponer la victoria de la libertad y de la tolerancia. Nuestra apertura y nuestra diversidad son nuestra fuerza más grande. París abrirá siempre sus brazos a todos los que quieren amarse.

Fotos: Twitter de Anne Hidalgo

Texto: Facebook de Anne Hidalgo

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