¿Homofobia en el Sínodo? El jesuita James Martin cuenta lo que tuvo que escuchar
“Las palabras ‘repugnante’, ‘repulsivo’ y ‘enfermizo’ se utilizaban regularmente”
James Martin, quien ha contado su experiencia al respecto en un artículo en la revista America, donde afirma que “las palabras ‘repugnante’, ‘repulsivo’, ‘antinatural’ y ‘enfermizo’ se utilizaban regularmente en las conversaciones conmigo”
“1) Las cuestiones LGBTQ son una ideología; 2) Es una forma de neocolonialismo; 3) Es una causa occidental; 4) Apoyar a las personas LGBTQ significa abrazar a la Iglesia opositora y sus enseñanzas; y 5) Las personas LGBTQ odian la Iglesia”, resumen Martin de sus conversaciones con otros padres sinodales
“Algunos delegados dijeron que las personas LGBTQ o no existen o simplemente se suscriben a una ideología (que los hace homosexuales). Un arzobispo africano me dijo: ‘La razón por la que la gente en mi país es homosexual es porque los estadounidenses les pagan para que sean homosexuales’”
¿Homofobia en el Sínodo de la Sinodalidad? Sí, al menos en el círculo en el que se movió el jesuita y padre sinodal James Martin, quien ha contado su experiencia al respecto en un artículo en la revista America, donde afirma que “las palabras ‘repugnante’, ‘repulsivo’, ‘antinatural’ y ‘enfermizo’ se utilizaban regularmente en las conversaciones conmigo”.
“Puedo decir que el año pasado algunos delegados hicieron contribuciones que iban más allá de la oposición que había escuchado previamente de los líderes de la Iglesia” en relación con la cuestión del acompañamiento pastoral al colectivo LGBTQ, escribe el religioso estadounidense, aún sorprendido por la intensidad de la oposición a las personas queer entre los miembros del Sínodo.
En conversaciones sobre todo con sinodales procedentes de las iglesias de Europa del Este y África, Martin, uno de los pioneros en la pastoral con este colectivo enumera en su artículo -que recoge el portal Katholisch– los siguientes aspectos recogidos en esos diálogos: “1) Las cuestiones LGBTQ son una ideología; 2) Es una forma de neocolonialismo; 3) Es una causa occidental; 4) Apoyar a las personas LGBTQ significa abrazar a la Iglesia opositora y sus enseñanzas; y 5) Las personas LGBTQ odian la Iglesia”.
Now in @americamag: “I listened to Synod delegates opposed to LGBTQ issues. Here are my responses.” The result of a year-long listening project with Synod delegates and Catholic leaders around the world, especially Eastern Europe and Sub-Saharan Africa. https://t.co/U4YfhdtnFA
— James Martin, SJ (@JamesMartinSJ) September 20, 2024
El considerar las reivindicaciones de este colectivo como una forma de ideología fue “un fuerte prejuicio por parte de los clérigos y miembros del sínodo” con el que se encontró Martin duranta la primera fase del sínodo, celebrado en el Vaticano en octubre de 2023.
“Algunos delegados dijeron que las personas LGBTQ o no existen o simplemente se suscriben a una ideología (que los hace homosexuales). Un arzobispo africano me dijo: ‘La razón por la que la gente en mi país es homosexual es porque los estadounidenses les pagan para que sean homosexuales’”.
I’ve spent the last year listening to @Synod_va Delegates and Catholic leaders who oppose, broadly speaking, “LGBTQ issues.” I also shared with them my perspectives. What I learned and my responses are in this new article on @OutrchCatholic https://t.co/aShpWLKpKA pic.twitter.com/s6TMqXYCAn
— James Martin, SJ (@JamesMartinSJ) September 19, 2024
Junto con esto, también se encontró varias veces con padres sinodales que afirmaban que el de la homosexualidad era una forma de neocolonialismo. “’Esto nunca ha sucedido en nuestro país’, me dijo un obispo. Es ‘una importación’, dijo otro. ‘Un visitante no deseado’, dijo otro”, rememora Martin, quien en los últimos tiempos se ha convertido en un objetivo de los movimientos más conservadores dentro de la Iglesia católica.
Fuente Religión Digital
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