¿Los pobres en la eucaristía?
La Teología del misal ha dejado a los pobres fuera de las preocupaciones de la comunidad que celebra la Eucaristía. (S. Agrelo)
Lo he visto a través de la tele. Se celebra la fiesta de San Mateo en nuestra tierra. Pero, poco a poco, ha pasado a ser la fiesta de la vendimia. Y entre sus actos, existe el pisado de la uva y la ofrenda a la Patrona, Nuestra Señora de Valvanera. Me ha chocado enormemente el que la celebración se hace con todas las fuerzas vivas políticas, religiosas, sociales, lúdicas, folclóricas ahí presentes. Pero, mientras tanto, existen cientos de vendimiadores que no participan para nada del acontecimiento. Ellos y ellas siguen cortando uva, arrastrándola hasta las bodegas, trabajando en los lagares… Unos lo celebran y otros están trabajando. Y es algo que se repite en muchas localidades con mayor o menor festejo. Los pobres, los obreros no están presentes en la celebración. Me viene a la mente “DERRIBÓ DEL TRONO A LOS PODEROSOS Y A LOS RICOS DESPIDIÓ VACIOS “
Es cierto que en algunas eucaristías se realiza la colecta. Pero por lo que veo es una recolección de céntimos y moneditas. ¿No sería mejor hacer una ofrenda mensual con una cantidad pensada y decidida de antemano?
En muchas parroquias es costumbre entregar una cantidad de dinero a la parroquia o al cura. Y hasta está a veces estipulada la cantidad. Pero es cierto que eso suena a “pagar la misa”, hecho que me suena muy mal y que, si mal no recuerdo, ha sido anulado por el papa Francisco.
Hay ocasiones en que se realiza una colecta para Cáritas. Pero los pobres no son el centro de interés de la Eucaristía ni en sus oraciones, ni en sus ritos. E incluso es muy frecuente que el cáliz y los ornamentos estén elaborados con excesiva riqueza.
Las personas inválidas suelen tener un lugar cercano al altar y ya se va haciendo rampa en todos los templos para facilitarles la entrada.
Se da a veces la pobreza de celebración, porque hay muy pocas personas, por la edad que tienen, porque no estamos dotados para el canto, por el mal servicio de audífonos… Hay aspectos que se pueden y se deben mejorar, pero en otras ocasiones no podemos celebrar sino con medios pobres. Pero eso sí, podemos celebrar con fe viva y con ganas. Y bueno será que en lugar de gastar dinero en los templos elegantes, lo empleemos en las parroquias pobres.
¿Cuándo volveremos a celebrar la Cena del Señor en las casas como los primeros cristianos? Siguiendo ese modelo se aumenta la participación y pueden estar presentes los pobres.
Gerardo Villar
Fuente Fe Adulta
Comentarios recientes