Inicio > Espiritualidad > El olvidado arte de la acogida

El olvidado arte de la acogida

Lunes, 27 de agosto de 2018

el-olvidado-arte-de-la-acogidaMari Paz López Santos
Madrid.

ECLESALIA, 27/07/18.- A veces suceden cosas que hay que contar; tan sencillas que, en principio, pueden pasar desapercibidas, pero si algo sorprende por dentro hay que animarse a contarlas.

Eso me sucedió hace unos días estando de vacaciones en un pueblo de Galicia, pequeño y marinero, a donde siempre gusta volver.

Nos juntábamos a comer diez personas, entre ellas tres niños. Dos del grupo nos adelantamos a ver si teníamos suerte y podían juntarnos tres mesas en la terraza de un bar donde hacer inmersión en los manjares que nos tienen acostumbrados en Galicia: pescado, marisco, carne… y pimientos de Padrón.

La cosa estaba complicada pues todas las mesas estaban ocupadas. Nos aconsejaron esperar y ver si se iban quedando libres. Permanecimos de pie expectantes. Justo al lado había una mesa con un joven tomando un café, con su móvil en la mano y unos cascos; alzó la vista y nos dijo: “¿Quieren sentarse?”.No nos dijo si queríamos alguna de las sillas que no estaban ocupadas… ¡Nos invitó a sentarnos!

Agradecida al tiempo que muy sorprendida por la oferta, le di las gracias, comentándole que éramos diez personas en total y que tendríamos que esperar a que se quedaran libres tres mesas. El joven era un inmigrante africano de amplia y blanca sonrisa que probablemente trabaja en la pesca. A mí esto no me ha pasado nunca en el entorno en que vivo, es decir, el mundo occidental.

En la terraza había más de veinte mesas pero sólo el ocupante de una de ellas ofreció que entráramos en su espacio. Al parecer no ha olvidado lo que significa acoger en su tierra de origen.

Sé por amigos y gente que ha vivido o vive en África, que la hospitalidad es un modo de ser de los africanos; acoger bien al que llega es hacerlo uno de los suyos.

He recordado textos del evangelio en el que se muestra la acogida, tanto del que acoge como el que se deja acoger. A veces es más difícil lo segundo, pues se vive desde una dimensión de superioridad. Jesús dejaba que le acogieran las gentes más diversas.

También vino a mi cabeza lo que decía San Benito en su Regla a los monjes: “A todos los forasteros que se presenten, se les acogerá como a Cristo” (RB 53,1). Ponía el listón muy alto San Benito.

En mi infancia, en casa de mi abuela, también tuve la suerte de ver a gentes de paso por la ciudad, que llegaban de visita o a pasar unos días, antes de seguir camino o volver a sus hogares.

Sumo al Evangelio, a la Regla de S. Benito y a mi abuela la experiencia de acogida y hospitalidad en el mínimo espacio de una terraza de bar que nos ofreció este joven africano, con el que me hubiera gustado entablar conversación, pero que cuando me quise dar cuenta, una vez conseguido el espacio para la cena, ya no estaba. Le doy las gracias desde aquí por hacerme ver una vez más que con simples detalles se llega más lejos que con grandes discursos.

Vivimos tiempos en que tanto personal como socialmente hemos de revisar qué estamos haciendo con el olvidado arte de la acogida.

(Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia).

Espiritualidad ,

Comentarios cerrados.

Recordatorio

Cristianos Gays es un blog sin fines comerciales ni empresariales. Todos los contenidos tienen la finalidad de compartir, noticias, reflexiones y experiencias respecto a diversos temas que busquen la unión de Espiritualidad y Orientación o identidad sexual. Los administradores no se hacen responsables de las conclusiones extraídas personalmente por los usuarios a partir de los textos incluidos en cada una de las entradas de este blog.

Las imágenes, fotografías y artículos presentadas en este blog son propiedad de sus respectivos autores o titulares de derechos de autor y se reproducen solamente para efectos informativos, ilustrativos y sin fines de lucro. Por supuesto, a petición de los autores, se eliminará el contenido en cuestión inmediatamente o se añadirá un enlace. Este sitio no tiene fines comerciales ni empresariales, es gratuito y no genera ingresos de ningún tipo.

El propietario del blog no garantiza la solidez y la fiabilidad de su contenido. Este blog es un espacio de información y encuentro. La información puede contener errores e imprecisiones.

Los comentarios del blog estarán sujetos a moderación y aparecerán publicados una vez que los responsables del blog los haya aprobado, reservándose el derecho de suprimirlos en caso de incluir contenidos difamatorios, que contengan insultos, que se consideren racistas o discriminatorios, que resulten obscenos u ofensivos, en particular comentarios que puedan vulnerar derechos fundamentales y libertades públicas o que atenten contra el derecho al honor. Asimismo, se suprimirá aquellos comentarios que contengan “spam” o publicidad, así como cualquier comentario que no guarde relación con el tema de la entrada publicada. no se hace responsable de los contenidos, enlaces, comentarios, expresiones y opiniones vertidas por los usuarios del blog y publicados en el mismo, ni garantiza la veracidad de los mismos. El usuario es siempre el responsable de los comentarios publicados.

Cualquier usuario del blog puede ejercitar el derecho a rectificación o eliminación de un comentario hecho por él mismo, para lo cual basta con enviar la solicitud respectiva por correo electrónico al autor de este blog, quien accederá a sus deseos a la brevedad posible.

Este blog no tiene ningún control sobre el contenido de los sitios a los que se proporciona un vínculo. Su dueño no puede ser considerado responsable.