De acuerdo a sus declaraciones, Jamie Watson, de 15 años de edad, ha sufrido una violenta agresión física, el pasado 22 de julio, último día escolar, de manos de varios compañeros de clase, sólo por su orientación sexual. «El asalto duró cinco minutos. Me pegaron y caí al suelo donde me patearon y golpearon por todo el cuerpo, incluyendo al cabeza. Estaba absolutamente aterrorizado y temí por mi vida», asegura el adolescente.

«Había tres tipos en total y todos llevaban máscaras. Fue una experiencia terrible y llegué tambaleándome a casa cubierto de sangre», declara la víctima, que fue trasladada al Hospital Hertlands, donde le diagnosticaron varias costillas rotas, un brazo fracturado y cortes y moratones, además de que tenía problemas para respirar. El detective que lleva la investigación, James Bennett, de la brigada de crímenes violentos, explica que están examinando las cámaras de vigilancia de la zona con el objetivo de encontrar alguna pista que les conduzca a identificar a los atacantes y también tienen la intención de entrevistar a cualquiera que pueda haber visto el asalto.

«En este punto, creemos que los atacantes eran locales y estamos seguros de que alguien sabe quiénes son (…). Este ha sido un horrible ataque que ha dejado al adolescente con heridas severas por las que ha necesitado tratamiento hospitalario. Los atacantes no mostraron ninguna consideración por su víctima y en repetidas ocasiones le golpearon en la cabeza y el cuerpo. Tengan la seguridad de que haremos todo los posible para encontrar a los responsables», explica el detective, para a continuación hacer un llamamiento a los ciudadanos para colaborar en la investigación.

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Jamie habría dado a conocer recientemente su condición de bisexual, sufriendo a continuación agresiones verbales por parte de algunos compañeros de clase, además de bullying, por eso su madre, Sharron Patrick, de 46 años de edad, ha decidido que se mude temporalmente a casa de sus abuelos, para que «al menos pueda salir de la puerta de su casa sin sentirse amenazado». En cualquier caso, no es el único incidente homofóbico registrado en Birmingham en los últimos meses, sólo que, según explica Sarah Lewis, miembro del grupo de apoyo a la comunidad LGTB de Hart Gables: Homes, muchas de estas agresiones homofóbicas no llegan a denunciarse a la policía.