Tras abandonar una fiesta en Forbes Street, Sydney, maquillado y con un vestido de fiesta de mujer, Isaac Keatinge caminaba hacia King Street, alrededor de la medianoche, cuando tres individuos se interpusieron en su camino, le increparon con insultos y le propinaron una paliza por la que tuvo que ser atendido en el Royal Prince Alfred Hospital en lo que la policía considera un crimen de odio.

«Se me enfrentaron tres heterosexuales que no apreciaron mi precioso vestido ni el maquillaje que llevaba», escribe la víctima en Facebook, acompañando a una fotografía con su cara magullada y ensangrentada. «Empezaron a insultarme por la manera en la que iba vestido. Me preguntaron por qué iba vestido como una mujer, que tenía que ser un marica…. Intercambiamos insultos por ambos lados. Me rodearon y los puñetazos llegaron rápidamente». De 25 años de edad, Keatinge, que se define a sí mismo de género mixto, «Terminé sobre el capó de un coche. Estaba tan desorientado», concluye.

Tambaleándose y como pudo, volvió a la casa donde tenía lugar la fiesta, donde todos los invitados reaccionaron con horror cuando vieron su cara ensangrentada. Lo metieron dentro y llamaron a la policía. Los agentes llegaron quince minutos después de la medianoche y percibieron que Keatinge tenía heridas faciales severas, por lo que inmediatamente lo llevaron al Hospital, donde le dieron 15 puntos de sutura, debido a un corte en la cabeza. La herida era tan profunda que dejaba su cráneo al descubierto. La policía investiga las circunstancias que rodean el incidente, incluyendo la posibilidad que fuera provocado «por su apariencia en ese momento», explica en un comunicado.

«Me sentía seguro en Newton. Mi padre y mi hermano me decían a menudo que acabarían pegándome por llevar vestido y maquillaje, pero nunca pensé que fuera a suceder», explica Keatinge. El violento altercado le pilló desprevenido tras ser tan bien recibido en la fiesta queer de la que venía. ¨Ser homosexual es realmente algo que me ha sostenido en tiempos de dificultad y realmente siento una especie de solidaridad global. Es muy importante para mi».

Al preguntarle sobre lo que se podría haber hecho para evitar que el incidente se pueda repetir, Keatinge contesta que educación social a través de programas como Safe School mejor que cualquier acción individual. Sostiene que la reacción de la comunidad ante el ataque ha sido asombrosa. «La gente ha tratado de llegar hasta mi a través de las redes sociales, en la calle y en mi lugar de trabajo. Este tipo de violencia ha afectado a mucha gente». El comandante del área local de Newton, superintendente Simon Hardman, ha declarado que los ataques «en base a prejuicios en la sociedad actual son absolutamente inaceptables. La Policía de Nueva Gales del Sur seguirá cualquier línea de investigación posible. Apelo a cualquiera que tenga información sobre los involucrados, y les recuerdo que cualquier información puede ser proporcionada de manera anónima a través de Crime Stoppers».

Fuente Universogay