Un adolescente de quince años intenta suicidarse quemándose vivo en la India tras sufrir el acoso de sus vecinos por ser gay
Un adolescente indio de 15 años se ha intentado suicidar quemándose vivo tras ser acosado por ser gay. El muchacho aún permanece ingresado en el hospital, al haber sufrido graves quemaduras en torso y piernas. Según su padre, el acoso comenzó después de que un vecino le sorprendiera en un parque con otro chico, en una situación íntima, y difundiera la noticia por todo el barrio.
Un estudiante de 15 años de la ciudad india de Madia Katra, en la provincia de Agra, se quemó a lo bonzo este pasado domingo tras haber sido objeto de burlas y acoso por parte de sus vecinos por ser gay. Los residentes de la zona salieron asustados de sus casas cuando en la tarde oyeron al muchacho gritando mientras salió de su habitación envuelto en llamas. Familiares de la víctima rápidamente le echaron agua y le envolvieron en una manta y le trasladaron a un hospital. El adolescente sufre graves quemaduras en el 40 % de las piernas y pecho. Según el parte médico su vida no corre peligro pero tendrá importantes secuelas físicas para el resto de su vida. En la India siguen siendo ilegales los actos sexuales que vayan “contra el orden de lo natural”.
Según relataba su padre, todo comenzó cuando un vecino del barrio sorprendió al muchacho en una situación de intimidad con otro chico en un parque. “Una vez que se propagó la noticia”, continuaba el progenitor, “algunas personas comenzaron a burlarse y a acosarlo. Lleno de malestar, se encerró en la habitación durante dos días. De pronto corrió fuera de la casa el domingo por la tarde, después de prenderse fuego a sí mismo tras impregnarse con gasoil”, explicó el padre.
En cuanto a su estado, el padre comentaba que “aún no puede hablar correctamente. Los médicos dicen que está fuera de peligro, pero no me lo creeré hasta que pueda hablar conmigo”, ha explicado el angustiado padre del niño a The Times of India. El muchacho es el más joven de cinco hermanos, sus amigos dicen que es un estudiante brillante y ha destacado especialmente en los estudios, logrando especiales distinciones el pasado curso. Ha optado por especializarse en ciencias, con el objetivo de convertirse en ingeniero.
El caso de este adolescente no es más que una muestra de dónde llevan las situaciones de homofobia de las personas. Posiblemente si este joven hubiese sido visto con una chica no hubiera pasado nada. Su futuro ahora es incierto porque esas cicatrices en su cuerpo le recordarán siempre por el calvario que tuvo que pasar.
Otro espantoso caso de un adolescente LGTBI abocado al suicidio. A la especial vulnerabilidad que supone siempre la adolescencia, los más jóvenes LGTBI deben sumar frecuentemente el acoso y la agresividad de su entorno inmediato, cuando no una sociedad misma que muestra repetidamente su desprecio y rechazo para quienes tienen una orientación sexual o identidad de género distintas a las estatuidas.
Esperemos una pronta y completa recuperación física del muchacho, y que el apoyo que parece prestarle su familia le sirva para poder superar con éxito la LGTBfobia social.
Homofobia de estado y violencia en la India
Como señalábamos anteriormente, el artículo 377 del Código Penal de la India castiga las relaciones sexuales “contra natura” con hasta 10 años de prisión. La homosexualidad en India es generalmente tomada como un tabú tanto por la sociedad india como por el gobierno.
El 2 de julio de 2009, en un fallo sorprendente, la Corte Suprema de Nueva Delhi derogó la sección del Código Penal que consideraba ilegal a todo acto homosexual. Según la Corte, las relaciones homosexuales consentidas entre dos adultos ya no podían ser consideradas ilegales en la India. En el fallo pronunciado, los jueces dijeron que se debía integrar a las personas homosexuales y que se les debía de respetar su calidad como personas y dignidad. También, hablaron de una nueva visión de la sociedad india hacia la homosexualidad, más tolerante y abierta. Pese a esto, no se puede aún decir que la homosexualidad es legal en la India, ya que el fallo, si bien sienta un precedente para acciones similares en toda la nación, era sólo aplicable en la jurisdicción de Delhi. Tras la apelación y a finales de 2013, la Corte Suprema decidió recriminalizar la homosexualidad, dejando sin efecto la histórica sentencia sancionada por el Alto Tribunal de Delhi en 2009 (en la que declaraba “inconstitucional” la prohibición de las relaciones entre personas del mismo sexo) volviendo a dar vigencia a la sección 377 del Código Penal indio, que castiga la homosexualidad con hasta 10 años de cárcel.
En los últimos años, nos hemos hecho eco del aumento exponencial de la violencia contra personas LGTB en la India, a raíz de la ilegalización de las relaciones homosexuales. Como ocurre en muchos otros países en los que existe homofobia de estado, los grupos homófobos en la India (incluidos los policiales) se creen en el derecho de realizar impunemente cualquier acción contra las personas sexualmente diversas. No es necesario que las víctimas sean realmente homosexuales (lo que en ningún caso les eximiría de su responsabilidad criminal), con que ‘lo parezcan’ es suficiente.
En 2014, un año después de la recriminalización de la homosexualidad en la India, el activismo LGTB denunciaba un repunte de la violencia homófoba. Y a principios de este mismo año recogíamos que en 2014 se realizaron un mínimo de 600 detenciones a personas que habían sido acusadas de practicar la homosexualidad. Una cifra, no obstante, que parece poco realista si tenemos en cuenta que desconocemos el alcance de la corrupción policial y la cantidad de afectados por extorsiones económicas a cambio de evitar el arresto o el procesamiento judicial.
En octubre de este 2015 dábamos cuenta de más casos de extorsión por ser o “parecer” homosexual por parte de miembros de la policía, quienes, según constatan los activistas LGTB “con frecuencia visitan los puntos donde los gais se encuentran y les extorsionan pidiéndoles dinero”.
Fuente Ragap y Dosmanzanas
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