Tim Cook: ser gay en el corazón del poder
Con la confesión pública de su orientación sexual, el CEO de Apple inspiró a miles de personas que luchan en el mundo por hacer una libre elección sexual.
El 2014 comenzó con una noticia cuya lectura fue cambiando a medida que corrieron los meses: en Rusia el gobierno de Vladimir Putin sancionó una ley que prohíbe demostraciones públicas de afecto gay. En la inauguración de las sesiones de la Duma, se jactó sobre cómo su país sostiene valores que “han sido perdidos en la decadente Occidente”. Putin lee bien sus encuestas: según Pew Research, el 72% de la población rusa asegura que “ser gay es inaceptable”. A raíz de la ley sancionada en Rusia, en las redes sociales se desató una feroz campaña para denunciar la sistemática persecución de la que son víctimas los homosexuales en ese país.
Precisamente, la ley de matrimonio igualitario demuestra uno de los giros más importantes que se dieron en la conciencia occidental en la última década. Más de diecisiete países en América, Europa y Sudáfrica obtuvieron su ley. Y en otros, como Estados Unidos, se logró un reconocimiento parcial.
¿Qué pudo haber provocado semejante cambio? Quizá procurar identificar una causa general sea un ejercicio en vano, pero indudablemente algo que impactó en la percepción de la sexualidad que tiene la humanidad ha sido Internet. El acceso a información en abundancia sin exponer la intimidad del consumidor contribuyó a romper prejuicios y tabúes de todo tipo. Mientras tanto, Rusia y China son excepciones respecto a la posibilidad de acceso irrestricto al contenido de Internet.
No obstante, en los espacios de poder de todo el mundo las minorías aún tienen muy poco protagonismo. El CEO de British Petroleum, John Browne, perdió su puesto al poco tiempo de haber admitido tácitamente su homosexualidad. Por eso, cuando Tim Cook, CEO de Apple, se animó a reconocer públicamente su orientación sexual, dejó un testimonio contundente. Se trata de una de las empresas con mayor impacto cultural y económico del mundo. Y su declaración gana coraje cuando afirma que ser gay ha sido “uno de los mejores regalos” que Dios le dio. Su mensaje aspira a ser uno reconciliado con la fe. Una retórica a tono con los propios gestos del papa Francisco, que supo sacudir el dogma de la Iglesia al preguntarse “¿Quién soy yo para juzgar?”.
Alan Turing, padre de la computación y responsable por haber desencriptado los mensajes nazis en la Segunda Guerra Mundial, terminó quitándose la vida luego de haber sido condenado por el gobierno británico a la castración química debido a su orientación sexual, en 1954. Lo hizo mordiendo una manzana envenenada con cianuro. Esa manzana mordida hoy es la insignia que los millones de máquinas vendidas por el equipo de Tim Cook lucen en su carcasa. Máquinas que están liberando la conciencia humana de pesados y absurdos prejuicios. En la historia siempre es preferible estar del lado del conocimiento antes que del de los tiranos.
Mirá los retratos de las 50 personas que nos inspiraron en 2014.
Fuente La Nación
Comentarios recientes