Ante el Sínodo de la familia: El desafío espiritual del debate sobre el matrimonio
Un texto publicado ya hace tiempo cuando se debatía el matrimonio igualitario en Francia y que nos envía el buen hermano Irimego. Y sigue estando de actualidad, en estos momentos en que se debate, acerca de la Familia en torno al próximo Sínodo… Esperemos que la Iglesia Católica se abra a la realidad de la rica diversidad Familiar…
El desafío espiritual del debate sobre el matrimonio
Los tiempos son duros para los homosexuales católicos, y particularmente entre ellos para los sacerdotes. Han sufrido y buscaron mucho tiempo para descubrir, nombrar, apreciar, esta sexualidad sorprendente que sentían. En el horizonte llega una ley que reconocería por fin que esta manera de desear y de amar es buena: ¡ qué liberación! Pero deben soportar, cada día, a sus amigos cristianos, a sus obispos, sus curas, sus colegas sacerdotes, y que ahora Radio Vaticano, que condenan con toda la fuerza este proyecto …
Ellos que deberían sostenernos, mira por donde nos atropellan. Ellos que jamás hicieron nada para que las personas homosexuales y las parejas del mismo sexo encuentren su sitio en la sociedad, condenan sin inteligencia ni discusión. Los tiempos son duros.
Sin embargo, estos tiempos que no hemos escogido son los tiempos en los que tenemos que vivir el Evangelio. Porque la puesta del debate actual no es solamente, para nosotros, el hacer triunfar la justicia y la verdad. La apuesta más secreta, la apuesta más fundamental, es vivir évangéliquement este tiempo de prueba.
He aquí que nuestros amigos se han hecho nuestros enemigos: ¿que vamos a hacer con esta invitación del Cristo a “querer a nuestros enemigos”?
Ya por todas partes nos golpean sobre la mejilla izquierda: ¿reaccionaremos a la invitación de Cristo, soportando pacientemente la bofetada sobre la otra mejilla, o bien vamos a librarnos de la llamada del evangelio?
Lo que hemos logrado pensar y decir alcanza sólo a bien pocas personas, y nuestra voz parece acallada por todo el ruido que le es contrario: ¿vamos a creer que nuestra voz es “como la semilla de mostaza del Reino de los cielos “? ¿Vamos a creer, con el Padre, que no sirve para nada inquietarse por la cizaña sembrada en su campo?
Somos traicionados por todas partes: ¿vamos a encontrar, en esta situación, la presencia del Cristo que ofrece la eucaristía en el momento de la traición?
Tendríamos otros tantos problemas que hay que resolver, tantos pobres a los que hay que ayudar, tantas parejas a las que animar, y que debemos soportar estos tormentos que nos desvían de lo esencial: ¿ sabremos escribir esta derrota de nuestra vida de la misma manera en la que son escritos los relatos del Evangelio, y la derrota de nuestro Maestro?
Y pretenden que somos incapaces de amar de verdad: ¿sabremos, al contrario, encontrar en nosotros la fuente del amor divino, e irradiarlo a nuestro alrededor ?
¡ Si ven en nosotros a hombres y mujeres que viven el Evangelio, si ven en nosotros resucitados que no tienen miedo de la muerte porque la vida y la alegría les vienen de Otro, posiblemente se convertirán!
Algunos pasajes bíblicos para meditar:
Salmo 40: ” hasta el amigo, que tenía mi confianza, y compartía mi pan, se ha vuelto en mi contra. “
Mateo 5, 39: ” Pero yo os digo: No resistáis a quien os haga algún daño.”
Mateo 5, 44: ” Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen. “
Mateo 13, 24: ” la cizaña. “
Mateo 13, 31: ” la semilla de mostaza. “
Al final de los cuatro evangelios, los relatos de la Pasión.
Y para soportar el golpe, están todos los salmos para pedir ser liberados de los enemigos …
(illustraciónn : Caravagio,el arresto de Christo)
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Fuente : Le blog du Père Jonathan
Cristianismo (Iglesias), Espiritualidad, Homofobia/ Transfobia., Iglesia Católica
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