División de opiniones después de que los productores de Dos hombres y medio, telecomedia muy popular en Estados Unidos, hayan anunciado un sorprendente giro en la que se prevé sea su última temporada. Uno de los dos personajes protagonistas, Walden Schmidt (interpretado por Ashton Kutcher) propondrá matrimonio al otro, Alan Harper (personaje interpretado por Jon Cryer), para así poder acceder más fácilmente a una adopción. Una “boda gay” de dos personajes heterosexuales que suscita importantes reservas entre la comunidad LGTB.

Lo cierto es que Dos hombres y medio, que nunca se ha caracterizado por su corrección política, siempre ha estado protagonizada por dos personajes cercanos al estereotipo de heterosexual más bien machista y misógino. Especialmente sus primeras temporadas, protagonizadas por Jon Cryer y Charlie Sheen (los hermanos Alan y Charlie Harper), que suscitaron algunas críticas por los gags alusivos a la homosexualidad en un tono que no era precisamente gay-friendly. Poco a poco, sin embargo, los guiones se fueron suavizando en este sentido, especialmente tras la desaparición del personaje interpretado por Charlie Sheen (al que CBS despidió de la serie) y su sustitución por Ashton Kutcher. Hasta ahora el punto culminante de ese proceso de “reconciliación” había sido la introducción como personaje fijo de Jenny Harper, hija lesbiana del fallecido Charlie, en la 11ª temporada de la serie (personaje interpretado por la actriz Amber Tamblyn).

Ahora, sin embargo, los productores anuncian un sorprendente giro final: Walden Schmidt desea convertirse en padre adoptivo, y ante las aparentes dificultades que al parecer encuentra como hombre heterosexual soltero para poder adoptar, propone matrimonio a Harper (la acción de Dos hombres y medio transcurre en California, donde existe matrimonio igualitario) para poder adoptar como pareja casada. Una idea que ha generado polémica en el colectivo LGTB, donde ya se han escuchado opiniones contrarias por lo que significa de banalización del matrimonio igualitario. Y ello pese a que la presidenta de la división de entretenimiento de la cadena CBS, Nina Tassler, ha insistido en que el abordaje del tema será positivo.

Por lo pronto, la presidenta de GLAAD (Alianza Gay y Lésbica contra la Difamación, organización que vela por una adecuada representación de la realidad LGTB en ámbitos como la televisión, el cine, la prensa escrita, el teatro o la música), prefiere no posicionarse en contra hasta conocer más detalles, e incluso alberga esperanzas de que al final la aproximación resulte positiva. “Esperamos que la serie reconozca no solo el progreso que hemos logrado en la aceptación de las parejas gays y lesbianas, sino también el hecho de que en muchos lugares del país las parejas del mismo sexo tiene que someterse a mayores niveles de exigencia para adoptar que las heterosexuales e incluso se les niega esa posibilidad”, ha declarado Sarah Kate Ellis.

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